Más de 30.000 campañas concurrieron este año a la 64ª edición del Festival Publicitario de Cannes. Los cotizados leones se han diversificado hasta alcanzar ya 26 secciones diferentes. Entre tanto «Grand Prix», uno con mucha historia: El galardón obtenido por KPN como mejor propuesta de entretenimiento.
En los Países Bajos, cada 5 de mayo se celebra el final de la Segunda Guerra Mundial. Es el día de la liberación, que viene precedido, por el día de la conmemoración nacional. En estas fechas, el ambiente festivo que rodea el homenaje a los caídos, no oculta la brecha generacional que se agranda con el paso del tiempo. Aquellos combatientes, los que aún perviven, son la última reserva de los crudos recuerdos de la resistencia. Una historia tan viva aún en su memoria, como temerosa de asomarse a un olvido irremediable. Ese pesar, admitido en una serie de entrevistas publicadas en la prensa, despertaron la sensibilidad de KPN. Si la misión de esta compañía de Telecomunicaciones es conectar a las personas… ¿Por qué no ayudar a perdurar su historia entre generaciones? La mejor respuesta es el fascinante relato protagonizado por «Evert_45″…
La historia según Evert.
Evert es un chico de nuestro tiempo. Un chico como tantos otros, hiperconectado, acostumbrado a convivir en el día a día con su “capa digital”. También es Vlogger y acostumbra a retratar trocitos de su vida en Youtube e Instagram. Nada que le haga un ser fuera de lugar… salvo que todo lo que le sucede, sucede durante la Segunda Guerra Mundial. La esencia de esta brillante producción de KPN no es otra que traducir la historia al lenguaje universal de las nuevas generaciones. Un ejercicio de contextualización narrativa que transforma una “asignatura” pendiente en puro entretenimiento. ¿Os imagináis los videos que puede subir a Youtube un muchacho mientras busca a su hermano recién fugado de un campo nazi?
El atractivo más singular de esta iniciativa, más allá del profundo mimetismo de códigos audiovisuales modernos, es, bajo mi punto de vista, el tono empleado por el protagonista. La mirada de Evert no dista mucho de la naturalidad y espontaneidad con la que nuestros youtubers actuales enfrentan “challenges”, “room tours” o trocean su último viaje. Una mirada aparentemente desubicada, pero con una poderosa coartada de cotidianeidad. La vida siempre pasa delante de su cámara desprovista del dramatismo lógico de la situación.
Otro enfoque, otros canales.
Porque la guerra que nos llega es la guerra que nos haría llegar un reportero adolescente desde su inherente sentido del humor, su autenticidad e ingenuidad y su justa dosis de ligereza e insolencia. Una crónica histórica servida con un sorprendente filtro interpretativo, pero con una cuidada puesta en escena y un exquisito rigor a la realidad de los acontecimientos. Una ficción que utiliza un eficaz contrapunto a través de su emotiva banda sonora, atenta a subrayar en todo momento el sentido real de esta acción.

KPN incluyó en su estrategia de comunicación la prescripción de youtubers e instagramers contrastados. La serie, dividida en 12 episodios, estrenó su último capítulo coincidiendo con la fiesta del día de la liberación. De hecho, la Telco contaba como socios del proyecto con el Comité Nacional y el Museo de la Resistencia Holandesa. El proyecto ha sido supervisado por historiadores reputados. Gracias a su contrastado rigor, ha merecido la inclusión de la iniciativa en planes de estudios nacionales. Además de los canales propios de Youtube e Instagram, Evert_45 tiene una maravillosa landing interactiva, donde la inmersión acústica y visual produce una excelente experiencia de usuario. La historia, si no te lo parecía, puede ser muy entretenida.